miércoles, 7 de octubre de 2009

Mas Viviendas

Estamos acostumbrados a que el gobierno destine recursos a la construcción de viviendas, siendo estos siempre insuficientes para siquiera tratar de solucionar el problema.

Por esta razón no cumple con la promesa de dotar de techo propio a una población deficitaria en vivienda. Necesitamos un gobierno que busque los medios de ayuda necesarios, para que los peruanos de escasos recursos cuenten con un núcleo familiar.

Qué se necesita para tener una vivienda: Terreno y financiamiento.

Si la persona posee el terreno, habría que ayudarla a que cuente con su título de propiedad y si este no es el caso, el promotor de viviendas económicas les estaría ofreciendo el proyecto “llave en mano”. El gobierno pues, debe promocionar, calificar e incentivar la participación de promotores privados en la construcción de viviendas sociales.

Ahora viene lo crucial, el dinero para la obra y su financiamiento.

Un gobierno anterior estableció la modalidad de contribución mixta, es decir, 45% aportaba una entidad bancaria en la modalidad de préstamo (19% de interés anual) y el 55% venían de los fondos del entonces Fonavi a una tasa del 3%. Obviamente esta modalidad consumía los fondos de vivienda que alcanzaban solo para algunos fonavistas, que dicho sea de paso no necesariamente pertenecían a las familias de escasos recursos.

Cómo entonces construir viviendas al alcance de todos. Propongo lo siguiente, que incluso se puede aplicar a los damnificados del Sur:
1.- El estado a través del Ministerio de Vivienda debe calificar: a) La vivienda social y b) al beneficiario del plan.
2.- El estado garantiza al beneficiario ante la entidad financiera hasta por el 95% del valor de la vivienda y por 30 años que es el plazo del préstamo, quedando la primera hipoteca a favor del estado.
3.- Siendo el crédito otorgado de bajo riesgo, el estado debe negociar con el sector financiero tasas preferenciales.
4.- Es responsabilidad de la entidad financiera el cobro mensual de la deuda al beneficiario y el estado, como aval, responsable de la operación de sacar a remate el inmueble cuyo propietario haya dejado de pagar 3 cuotas, previa notificación del ente financiero.
5.- Si existiesen fondos de vivienda, estos podrían utilizarse para reducir las tasas de interés de los entes financieros con el objeto de reducir los pagos mensuales y este interés no pagado, acreditarlo en una cuenta para que el beneficiario lo cancele al final de su préstamo.

No cree usted que esta podría ser una solución.

Alejandro Montoya

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